SEGURIDAD:
Una cubierta cerrada es un elemento de seguridad anti-ahogamiento ya que impide el acceso al agua evitando posibles accidentes.
TEMPERATURA:
Permite alargar la temporada de baño y disfrutar de la piscina durante mucho más tiempo.
AHORRO:
Reduce la evaporación del agua hasta en un 90% y es un aislamiento térmico muy efectivo lo que se traduce en un gran ahorro en agua, energía y costes de mantenimiento.
LIMPIEZA:
Protege la piscina de la suciedad exterior como hojas de árbol, polvo, insectos. etc. La piscina estará protegida frente a las inclemencias del tiempo y necesitará menos productos químicos.